miércoles, 18 de marzo de 2009

y... ¿por qué no el Día del Hombre?

El día de la mujer, la premiación de Magaly Medina, el triunfo de Kina, publicaciones y anuncios en medios de prensa escrita y reportajes en la televisión acerca de la importancia de la mujer me trajeron a la memoria una pregunta que me hize hace un tiempo atrás: ¿celebrar un día de manera especial al supuesto sexo débil no genera más inequidad?

Un día un compañero de trabajo me abrazó efusivamente y entre risas me felicitó por mi día....pensé, ¿habré sido ascendida?, (porque no estabamos aún en noviembre, mi cumpleaños). Pues no, lo hacía por mi día como mujer. Desde aquella fecha, y ya siendo madre de un niño, me queda la curiosidad de entender por qué somos reconocidas entre “los seres humanos” por el sólo hecho de ser mujeres.

Estoy segura que los hombres y mujeres somos iguales en derechos, pero reconozco que hoy en día esto no se cumple, al menos no para todas. Con todo esto en mente me pregunto si… ¿celebramos este día porque nos hemos “posicionado” entre los hombres luego de muchos años de dominación(a pesar de que aún para muchas esto continúa,)o es que necesitamos refrescar la memoria a los hombres y mujeres acerca de nuestro valor (¿somos mejores?) , o simplemente persistimos en mantener esa diferencia entre los géneros?

Mi hijo, ya con casi 8 años, me asegura que hay un día para el hombre. Claro está que no lo hay; al menos no es sonado. Para él es inconcebible que el mundo celebre a la mujer y al hombre no. Hoy en día aspiramos a que el trato sea equitativo, tanto para hombres como para mujeres y eso le enseñamos a nuestros hijos. Sin embargo y con todo lo antes mencionado, no será que las mujeres estamos cayendo en una especie de extremismo. Pienso que él como muchos otros niños pueden pensar que la mujer es más importante que los varones o que es menos y requiere ser festejada para ser respetada.El mundo de ayer es diferente al de hoy.

Seguir arrastrando la frustración que muchas llevamos por el trato poco equitativo que recibimos de parte de algunas personas creo que puede no ser necesariamente una forma de promover la equidad sino más bien un enfoque que pueda marcar extremismos poco constructivos e igualitarios.Ahora bien, si él creciera en una localidad donde se vulneran los derechos de las mujeres, como sucede en muchas partes, ¿su visión acerca de este tema sería diferente?

2 comentarios:

  1. Hay muchos argumentos para tratar de darle valor a cosas como el día de la mujer, o el voto por una mujer, o el % de negros admitidos en las universidades de los estados unidos, etc. Pero para mí es y será siempre una huachafería (Muy Kitcsh, como diría mi esposo). Al fin y al cabo el sexismo y el racismo no se curan en las leyes o en los porcentajes, se curan en las calles. De qué sirve que haya un negro por cada 5, o una mujer por cada voto que hagas, si van a seguir siendo humillados y golpeados en la intimidad de la casa o el vecindario. El camino es otro, definitivamente otro.

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  2. Desarrollo mi trabajo como Coach Personal y Empresarial y teneis toda la razón. Trabajo en muchos casos más con mujeres que con hombres y definitivamente los extremos no son buenos, nin el machismo ni el feminismo, ya que hace que se alejen hombres y mujeres más aún, creando si cabe más intolerancia, falta de respeto, etc. Si queremos acercarnos al punto medio, al punto de equilibrio, el camino está en otra parte. Dijo Margaret Tatcher algo que siempre me causó impacto: Si una señora tiene que recordar que lo es, ... entonces malo. Creo que con esto ocurre igual. No haría falta "recordar" que somos iguales, cada uno con sus caracteristicas, valores, fortalezas y debilidades. Mientras no reconozcamos esto, será dificil entender que nadie tiene que "recordar" aquello que ya es, con todo lo bueno que tiene por ser quien es.

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